Desde la psicología clínica:
• Identificación del otro como “trastornado” no siempre implica distancia emocional. Muchas veces, incluso después de reconocer rasgos narcisistas (que es el trastorno de personalidad más popular en los seudo-divulgadores en Tik Tok) o de otro trastorno, la persona sigue esperando que cambie, que se cure, o que “por amor” modifique su comportamiento.
• Ambivalencia emocional: se puede tener claridad cognitiva (“sé que esto no está bien”) pero no fuerza emocional (“no puedo soltar esta relación”). Esto es muy común en vínculos con dependencia emocional.
• Dinámicas complementarias disfuncionales: la persona que identifica al otro como “trastornado” puede estar asumiendo un rol de salvador, mártir o terapeuta dentro de la relación. Este rol sostiene la relación por gratificación narcisista invertida: “yo lo aguanto, yo lo entiendo, yo soy especial porque me necesita”.
Desde el análisis funcional:
• La etiqueta de “trastorno” muchas veces aparece como una verbalización que justifica el aguante: “no es que sea malo, es que tiene un trastorno, no puede evitarlo”. Esto reduce la disonancia cognitiva y justifica la permanencia.
• Para quien es identificado como narcisista o con TLP, quedarse puede responder a refuerzos sociales, económicos, o simplemente al hecho de tener alguien que gira alrededor de él, lo que refuerza su sentido de control o validación.
Desde el enfoque sistémico:
• Ambos cumplen funciones dentro del sistema relacional. A veces, el conflicto es una forma de conexión: aunque sea destructivo, sigue siendo vínculo. Esto genera un “pegamento” que es más fuerte que la lógica racional.
Permanecer en una relación donde el otro es visto como «trastornado» (aunque mi modelo no utiliza etiquetas) no siempre es una paradoja absurda, sino el resultado de estructuras internas no resueltas, patrones vinculares aprendidos, y beneficios secundarios que ambas partes pueden estar obteniendo (aunque a un alto costo emocional).
Referencias:
Millon, T., Grossman, S., Millon, C., Meagher, S., & Ramnath, R. (2004). Personality Disorders in Modern Life (2nd ed.). Wiley.
Kernberg, O. F. (2009). The Inseparable Nature of Love and Aggression: Clinical and Theoretical Perspectives. American Psychiatric Publishing.
Minuchin, S. (1974). Families and Family Therapy. Harvard University Press.
Haley, J. (1980). Leaving Home: The Therapy of Disturbed Young People. McGraw-Hill.
Hayes, S. C., Barnes-Holmes, D., & Wilson, K. G. (2012). Acceptance and Commitment Therapy: The Process and Practice of Mindful Change. Guilford Press.
Luciano, C., & Valverde, C. (1999). Análisis funcional de la conducta: un enfoque contextual de la conducta humana. Revista de Psicología General y Aplicada, 52(1), 43-67.